Aquí estamos. Tenemos una persona diminuta entre nuestros brazos y nos volvemos locas: ¿qué necesita el bebé? ¿Qué tengo que comprar? ¿Cómo cuido su piel?
La respuesta muchas veces es más fácil de lo que parece y, después de dos niños, estas son mis pautas básicas.
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Aunque parezca obvio, lo más importante es tomarse muy en serio las citas médicas.
Las revisiones en las que miden los pesos y tallas del bebé son cruciales para detectar posibles problemas, como:
Además, nos van a indicar su alimentación, vitaminas y demás pautas.
Es uno de los momentos más importantes con los bebés. Un buen baño mejora la calidad de su piel, su regularidad intestinal y hasta el sueño.
Bañar al niño siempre a la misma hora, lo más cerca de su hora de dormir como sea posible, le va a ayudar a conciliar el sueño. Pronto va a entender que después del baño se tiene que dormir.
Siempre me ha parecido fundamental invertir en buenos productos, tanto para mí, como para mis hijos.
Aunque hay muchos productos en el mercado, para el baño de los bebés lo mejor es coger un producto sin jabón, que sea lo más natural posible, e hipoalergénico, adecuado para la piel sensible.
También un champú natural para bebés y niños. En el caso de mis bebés, siempre tuvieron mucho pelito, así es qué pronto tuve que usar uno que incluyese acondicionador.
Su ropa hay que lavarla con detergentes especiales para bebé que incorporen menos químicos y más ingredientes naturales.
Mantenerla siempre nutrida y suave va a ayudarles a protegerse frente a irritaciones y rojeces.
Un extra de hidratación en el culito en cada cambio de pañal, incluso aunque no esté irritado. Ayuda a proteger su piel.
Dar un masaje al bebé es muy valioso, tanto para el bebé como para nosotras.
Me da la sensación de que muchos de estos cuidados nos empiezan aparecer menos importantes una vez queremos que los niños ya no sean tan bebés.
Es verdad que su piel ya no es tan frágil ni tan fina, pero sigue siendo delicada.
Por eso, me preocupo por mantener muchos de estos cuidados durante el resto de la infancia.
Yo sigo empleando sus productos naturales, aunque ya sean niños mayores.
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