El sexo y los orgasmos nos rejuvenecen a nivel celular, emocional y en la calidad de la piel y el cabello.
Tener mucho s e x o (sorry, no quiero que se me llene el blog de spam) es el mejor tratamiento antiedad. No lo digo yo, sino numerosos estudios que afirman que la asociación entre la actividad amorosa y la concentración de hormonas ralentiza el proceso de envejecimiento.
Estos mismos estudios también afirman que hacemos menos el amor que nuestras abuelas. ¿Cómo es esto posible? ¿Acaso tenemos a mano un suministro ilimitado de crema La Mer y no lo estamos aprovechando?
DE UN VISTAZO
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Un mayor nivel de estrógenos afecta positivamente a nuestra belleza.
En realidad, tiene sentido. Nuestro cuerpo se prepara todos los meses para que seamos madres. Si, además, percibe que hemos tenido un orgasmo, va a trabajar para que cuando llegue ese potencial bebé, estemos jóvenes y fuertes para poder cuidarlo.
He encontrado estudios de todo tipo, y todos llevan a la misma conclusión: las personas que tienen orgasmos varias veces a la semana pueden llegar a parecer mucho más jóvenes (hasta 10 años).
Los estrógenos son unas hormonas claves para el funcionamiento de la piel: mejoran la circulación, los folículos del cabello y disminuyen la acción de las glándulas reguladoras de grasa.
Además, incrementan la producción de colágeno, ácido hialurónico y aumentan el grosor de la piel (al igual que el retinol).
Es decir, que con una cantidad alta de estrógenos, la piel y el cabello van a estar más sanos y bonitos.
¿Cómo conseguirlo? Sencillo. Las mujeres que tienen orgasmos a menudo tienen mayor nivel de estrógenos en su cuerpo. Esto es debido a que, durante el orgasmo, se aumentan los niveles de hormonas.
Potencia el crecimiento del pelo, especialmente durante la fase anágena.
El incremento de colágeno, elastina y ácido hialurónico y de la capacidad de retención de agua, mejoran la calidad de la piel.
La unión entre la actividad cardiovascular y el aumento de estrógenos consiguen mejorar la circulación sanguínea, transportar oxígeno a todo el cuerpo y sudar. Esto hace que la piel se quede luminosa y radiante.
La prostaglandina (presente en el semen) es un poderoso antidepresivo.
Durante el orgasmo se libera oxitocina. Esta disminuye los niveles de cortisol (la hormona del estrés) el cual destruye el colágeno y elastina presentes en nuestra piel.
El estrés también es un impulsor de las imperfecciones y granitos en la piel.
Esta fase, tan temida por todas las mujeres, conlleva una disminución de estrógenos. Al aumentar durante el amor, se pueden reducir los síntomas.
Los orgasmos aumentan el número de células NK (natural killer). Estas pertenecen al sistema inmune y nos protegen ante varias infecciones y tumores.
En resumen, el s e x o es uno de los mejores tratamientos antiedad: sano, divertido y gratuito. Así que, la próxima vez que te duela la cabeza, piénsatelo dos veces.